Visitar el Vaticano

Si estás en la ciudad de Roma uno de los imprescindibles y algo que te dirá todo el mundo que debes de ir si o si, es a visitar el Vaticano. Y es que, visitar esta ciudad estado es uno de los imprescindibles de Italia por varios motivos.

El Vaticano actualmente recibe alrededor de 5 millones de viajeros al año, ¡ahí es nada! lo que hace que un día típico de verano o festividades se concentren hasta 20.000 personas. Y por eso mismo, como queremos evitar agobios os comentamos como llevar tu visita al Vaticano lo mejor posible así que ¡ponte bien cómoda/o, que empezamos con la visita!

Contextualicemos el Vaticano…

La ciudad estado de el Vaticano es la sede central de la Iglesia Católica Romana. Es el hogar del Papa (actualmente Francisco I) y guarda entre sus paredes uno de los tesoros de la arquitectura y el arte renacentista. La Ciudad del Vaticano tiene tan solo una extensión de 0,44 km² (44 hectáreas) y una población muy pequeñita (o grande según se mire para la extensión que tiene) de unos 800 habitantes.

Cómo llegar al Vaticano

La ciudad-estado del Vaticano está rodeada por la ciudad de Roma pero un tanto alejada del resto de sitios turísticos, por ejemplo a unos 4’5 kilómetros al noroeste del Coliseo, que sería el punto de interés más alejado. Vemos entonces que no está en el centro de la ciudad pero tampoco es complicado llegar a él ni a pie ni en transporte público.

Si usas el transporte público, debes de coger la línea de metro A. Nosotros la cogimos desde la estación de La República, que era la más cercana a nuestro alojamiento y tan solo tardamos unos 12 minutos en llegar. Nos fuimos temprano por si acaso y estábamos antes de las 8 en la plaza de San Pedro y nuestra visita era a las 9 en los Museos Vaticanos. Así que, como veis da tiempo de sobra. Al coger esta línea debes bajar en la estación de metro de Ottaviano. Desde ahí tienes unos 10 minutos andando hasta el Vaticano. Verás que está señalizado en la calle con carteles pequeños.

Por el contrario, si vas a ir caminando lo más bonito sería llegar por la Via della Conciliazione. Esta gran avenida fue pensada precisamente para que peregrinos y viajeros pudieran ir viendo poco a poco la Plaza de San Pedro y sentir la sensación de ser acogidos por ella.

Cuándo visitar el Vaticano

Hay que tener en cuenta dos cosas. Por un lado, que el mismo Vaticano cierra algunos días del año, por diferentes motivos, entre ellos los religiosos. Por lo que es aconsejable hacer una previsión en la planificación del viaje a Roma y algo que te puede ayudar es echarle un ojo al calendario oficial de los Museos Vaticanos actualizado.

Si tenemos en cuenta el momento del día al que ir siempre se aconseja ir a primera hora, pero obvio que no podemos estar siempre a primera hora en todos los sitios de Roma y al final hay que elegir. Pues bien, esta sería una de las opciones obvias. Como os decíamos antes, llegamos a las 8 de la mañana a la Plaza de San Pedro y os aseguramos que no había nadie, nos pareció hasta raro y pensamos que pasaba algo jajaja. Lo mismo sucede con el Museo Vaticano, si vas a primera hora serás de los primeros en entrar y tener las salas para ti solo ya que más tarde pueden estar abarrotadas y apenas llegar a ver bien las cosas.

Otra opción interesante aunque algo menos práctica es ir por la tarde, ya que ahí irías con la presión de la hora de cierre pero también encontrarías menos gente y disfrutarías de las estancias de otra manera.

Qué ver en el Vaticano

Al estar en un espacio tan reducido es fácil de llegar de un punto a otro, tres son sus principales atractivos: La Basílica de San Pedro, la plaza del mismo nombre justo enfrente y los Museos Vaticanos. Todos ellos con mucha historia, por lo que si quieres saber mucho más tienes free tour disponible aquí.

Plaza de San Pedro

Esta plaza se sitúa delante de la Basílica del primer papa del catolicismo. La plaza tiene una parte con forma de trapecio y la otra tiene forma de óvalo con el obelisco egipcio en el centro. Estos dos grandes espacios están rodeados por cuatro columnatas que cuentan con un total de 284 columnas y 88 pilastras coronadas con 96 estatuas de mármol. Esto es obra original de Bernini, uno de los más famosos y reconocidos arquitectos y escultores del Renacimiento.

Basílica de San Pedro

Su construcción comenzó en 1506 y finalizó en 1626. En su construcción participaron varios arquitectos entre ellos Bramante, Miguel Ángel o Carlo Maderno. Con una altura de 136 metros en su cúpula, hace que su figura domine el horizonte de Roma. Esta basílica es considerada como uno de los lugares más sagrados del catolicismo. En su interior se pueden ver el Baldaquino de Bernini, La Piedad de Miguel Ángel y la estatua de San Pedro en su trono como curiosidad esta última estatua tiene el pie derecho tan desgastado debido a los besos de los fieles.

La cúpula fue iniciada por Miguel Ángel, posteriormente Giacomo Della Porta continuó con el trabajo y Carlo Maderno la finalizó en 1614. Subir a ella es posible, y de esa manera admirar el horizonte romano en 360 grados.

  • Subir a la Cúpula (a precios de 2021):
  • Ascensor hasta la terraza y 320 escalones a pie: 10 €
  • Subida a pie (551 escalones): 8€
  • La entrada a la Basílica de San Pedro es gratuita.

El último tramo se realiza por medio de una empinada y estrecha escalera de caracol que puede llegar a resultar algo agobiante. El acceso está controlado, es posible que encuentres cola para comprar cualquiera de las entradas. Ten paciencia, nosotros estuvimos casi una hora tras la salida de los museos pero a primera hora no había nadie.

Museos Vaticanos

Son varias las salas que se pueden visitar. Hay la opción de un recorrido corto y otro largo. En la entrada te darán un mapa para poder irte localizando si eres de los que se les da bien interpretarlos, y de esta manera ir eligiendo las salas. Nosotros escogimos primero el recorrido corto para ir más rápido a la Capilla Sixtina y verla con menos gente – lo cual ya nos llevó más de una hora y pico larga- y cuando acabamos ese recorrido empezamos a visitar las otras salas dentro del recorrido largo. Nos pareció mejor porque ya eran las 12 y había bastante gente por todos lados

Entre las salas a ver destacamos: La propia Capilla Sixtina de Miguel Ángel, es el único lugar en donde no se pueden tomar fotos. ¡Júzgala tu mismo! la sala de los clarooscuros o el apartamento de los Borgia. Pero, date tiempo que podrás ver muchas más con calma y sin prisa.

Entrada. Actualmente es obligatorio hacer la reserva online y desde enero de 2022 ya está disponible la venta presencial en taquilla. Aún así aconsejamos hacerlo online, es mucho más cómodo y te evitas sorpresas en tu planificación. Por otro lado, hay varios tipos de entrada: la «típica» que es la entrada libre con un coste de 16€, la guiada, otra que te ofrece desayuno o incluso la llamada «El vaticano escondido». En el momento en que compres online verás las diferentes opciones y se entiende de manera sencilla. En cada una de ellas puedes ver el Vaticano desde otra perspectiva.

Los Jardínes Vaticanos

Los Jardines del Vaticano cuentan con una extensión de 23 hectáreas. Actualmente son un espacio natural, arquitectónico y artístico de gran belleza. En ellos es posible encontrar monumentos del Renacimiento y del Barroco, varias fortificaciones medievales, parques y un área boscosa de 3 hectáreas. Su estilo está compuesto de tres diferentes: italiano, inglés y francés.

Visitar los Jardines del Vaticano solo puede hacerse en compañía de personal interno, por lo que es necesario reservar la Visita Guiada de los Jardines del Vaticano. Si que podemos encontrar dos alternativas posibles: una de ellas con guía y la otra a bordo de un autobús abierto y con el apoyo de una audioguía. Nosotros no lo hicimos por tiempo y precio, ya que tiene otro coste extra de 16 euros.

Roma Pass

Es la típica tarjeta que puedes encontrar en ciudades turísticas incluye el transporte público además de visitar algunos de los museos de Roma. Hay dos opciones: 72 horas por 56 euros y 48 horas por 32 euros. No está mal de precio en general dado lo que cuestan algunos museos, pero debes de mirar primero si te compensa con la suma total por separado o no y sobre todo, por tiempo dedicado para optimizarla. No la vimos muy rentable por el hecho de que a pesar de que visitas muchos sitios lo más emblemáticos no están incluidos.

  • Información extra
  • Puedes comparar con la Omnia Card y la Vatican Card.
  • Más info de la Roma Pass desde su web.

Alrededores del Vaticano

Si la visita se te queda corta y aún quieres más sempre puedes hacerte con un free tour para una mejor inmersión en la ciudad italiana.

Residencia de Castel Gandolfo

Castel Gandolfo se encuentra a unos 40 minutos de Roma, es una pequeña localidad de unos 8.000 habitantes famosa por ser donde se localiza la residencia de verano del papa. Desde que está el papa Francisco es posible visitarla y ver entre otras cosas la capilla privada, la biblioteca, el Salón de los Suizos, la Sala del Consistorio o la Sala del Trono. Todo ello se suma a las 55 hectáreas de jardines, con rincones proyectados por el arquitecto Bernini, una zona arqueológica e incluso una granja orgánica. Tiene un coste de 18 euros.

Castillo de Sant Angelo

A lo largo de los siglos ha estado destinado a diferentes funciones: fortaleza defensiva, cárcel, residencia renacentista y, ahora, museo y sede de eventos culturales.

El Castillo tiene origen romano y se concibió como un mausoleo personal y familiar para el Emperador Adriano en el año 135. Pronto cambió su destino a edificio militar y no fue hasta el año 590, con el Papa Gregorio I, que adquirió su actual denominación.

Hoy día una escultura de un ángel preside su cúspide y es muy característica. Investigad un poco sobre su historia porque es bien curiosa, no nos detendremos más aquí porque tienes un tour específico para ello. Para visitarlo hay 7 niveles diferentes. Su coste es para la entrada de 14 euros y el precio reducido (Ciudadanos UE menores de 25) por 7 euros.

No olvides pasear por el bellísimo Ponte Sant’Angelo, que comunica el castillo con el centro de Roma cruzando el Tíber. Además, desde aquí tendrás una bonita puesta de sol ¡no te la pierdas!

El Passetto di Borgo

El pasaje de Borgo es un corredor que une el Castel Sant’Angelo con la ciudad del Vaticano. Un pasaje o camino elevado que se usaba como vía rápida de escape o traslado entre ambos puntos y que se construyó en 1277.

Trastevere

Este barrio se ha vuelto muy popular desde hace unos años. Lleno de ambiente y locales de hostelería para disfrutar de la noche romana, es una buena opción pasear por él tras una visita al Vaticano. Nosotros aprovechamos para comer por aquí tras salir de la visita pero también hay excursiones guiadas disponibles.

Alojamientos en el Vaticano

Dentro de El Vaticano mismo no vas a encontrar nada pero hay bastantes opciones a su alrededor si quieres aprovechar el tiempo-distancias. Un antiguo monasterio reconstruido como el de Residenza Paolo VI nos parece ¡una idea fantástica! eso si, tendréis que preparar el bolsillo. Algo de estilo más moderno y en el cercano barrio de Prati tenemos Flat 285 La Suite.
Nuestra opción fue el Four Elements, un apartamento compartido con baño privado. Está situado en una zona más céntrica aunque más alejada de El Vaticano. Como os dijimos en metro no tardamos nada, así que sigue siendo una magnífica opción. Estando equidistante del resto de puntos de interés de la ciudad de Roma.

Esperamos que toda esta información os haya sido de utilidad sobre visitar el Vaticano y si aún tenéis alguna duda podéis comentarnos sin problema alguno. 😉

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.

Volver arriba